Nos inscribimos para participar en la II Carrera Popular de Martiago por el trato recibido el año anterior y la San Silvestre. Lo hacemos el amigo Sebas y yo, ya que Ivan tenía compromisos sociales y Pedro últimamente no participa en ninguna prueba al no superar las lesiones. En la última semana antes de la prueba, María y Lara se deciden a participar y también las inscribo.
Quedamos en el Bar Camarosa a las 5:45 de la tarde para salir a Martiago, el calor aprieta con fuerza y las ganas de correr son totalmente inexistentes. A las 6:00 nos encaminamos para Martiago y cuando llegamos ya van a iniciar la carrera los más pequeños lo que hace que tengamos que retirar el dorsal deprisa para que María y Lara puedan correr en la prueba. Sobre las 6:45 dan la salida a la carrera de 1.500 metros en la que participan Lara y Maria y que consta de una vuelta pasando por la plaza del Ayuntamiento y luego por la Iglesia, entrando en meta primero María seguida de Lara.
Celebradas las carreras de pequeños, toman la salida los andarines bajo un calor de justicia, retrasándose nuestra prueba hasta las 20:10. Un calentamiento rápido en el que las sensaciones son malísimas el calor es agobiante y a las 20:05 nos ponemos en la salida no muy numerosa sobre unos 100 participantes. La salida se mezcla con la llegada de andarines que la convierte en un pequeño caos, a las 20:10 salimos y las sensaciones son como en el calentamiento, muy malas. Salgo en la parte final del grupo y voy remontando poco a poco pero nada cómodo. El calor es asfixiante y el circuito urbano se hace un poco pesado para salir hacía las piscinas e iniciar un recorrido por camino con subida constante y demasiado calor. Los avituallamientos y riegos durante la carrera están muy bien ya que hay agua constantemente, entramos por la parte de la Ermita nuevamente al pueblo y lo rodeamos para iniciar el camino que va hacía las piscinas. A la salida del pueblo y, el inicio del camino a las piscinas nos encontramos en el km 8, lo que hace que haya una recta de un km de ida y otro de vuelta que se hace eterno. Cuando inicias la recta vas viendo los corredores que tienen que llegar al final y luego volver y se te hace muy,muy pero que muy pesado.
El tiempo que hago es un poco inferior al de Bañobarez son 44:20 quedando en el puesto n º 22, Sebas entra detrás con un tiempo de unos 48:49 en el puesto n º 44 . La llegada a meta supuso un pequeño caos al tener que tomar los dorsales a mano. Lo mejor de la prueba sin duda son las duchas artesanas que tenían preparadas los organizadores, realizadas en un calle tapada con lonas y unas gomas de una cuba con el agua a muy buena temperatura, siendo la amabilidad de la persona encargada de éstas de 10. A mejorar, la organización en cuanto al recorrido de los pequeños y si es posible la toma de tiempos y las clasificaciones de forma más rápida y, en cuanto al recorrido cambiaría sin duda los dos km finales que se te hacen eternos.
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